16 marzo 2009

2. Muros y lazos


Nos mentiría si no reconociera que la pregunta ya había rondado su cabeza en alguna que otra ocasión. Sin embargo, siempre intentaba evitarla, buscando cualquier otra cosa en la que pensar o simplemente respondiendo con un monosílabo que, aunque era el correcto, no llegaba a reflejar la gravedad del asunto que se traía entre manos.

No. Esto no tiene futuro. Nunca lo tuvo, ni en diciembre, ni en octubre, ni en septiembre. Se lo dejaron bien claro desde el principio, que no, que nunca más iba a volver a suceder. Quizá en aquel momento debería haber cogido las tijeras y cortar por lo sano, antes de que los lazos, o lo que quiera que les une en este momento, se colara por las grietas del no tan infranqueable muro del “yo no me voy a enamorar jamás”.  Ahora, la llegada al final (que no a la meta) se torna difícil y todo es mucho más complejo. Y absurdo, también absurdo. 

1 comentarios:

Mrs. Blogspot dijo...

Me encanta cuándo actualizas el blog. Aunque sea con historias q amenazan tu sueño. Te diré uno de mis secretos: "fomentas lo que te separa o fomentas lo que te une" Aunque no me hagas mucho caso que mira las horas que son y yo ya voy (muy) falta de sueño...muak!

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