28 junio 2009

23. En mi estómago


Es como si mi estómago se hinchara, pesara más, y ese nuevo volumen permitiera que el aire circulara mejor por mis pulmones, como seña de que debo saber que vives.

Es como si mi estómago se contrajera, se redujera a una pequeña pelotita, a la vez que mis ojos van leyendo cosas ñoñas.

Es como si mi estómago se moviera de arriba a abajo, de izquierda a derecha, como si diera vueltas y se pusiera boca abajo, para que los jugos gástricos se den cuenta de que no me estás haciendo caso, de que no estás en casa, de que te has ido a dormir demasiado pronto.

Es como si mi estómago se perforase, como si alguien lo sacara a través del abdomen para hacerle budú, para partirlo en dos, para pisotearlo, cada vez que pienso que no vas a volver o que hay miles de hombres más guapos que yo.

Es como mi estómago vibrase, como preludio a la explosión final que tendrá lugar en Atocha, o frente al Corte Inglés, o en un nórdico azul y marrón.

Vives en mi estómago. Me gusta que estés ahí.

1 comentarios:

Mrs. Blogspot dijo...

Cuándo he visto la foto del estómago he pensado "puag"; al termianr el post sólo puedo pensar "quiero que alguien me dedique la foto de un estómago!!". Eres un crak, jotadé^^

Publicar un comentario